Para mantener en buen estado de funcionamiento y uso diversos metales, el decapado es frecuentemente necesario para eliminar la oxidación e impurezas que pueden acumularse con el tiempo en las superficies metálicas. Quienes realizan el proceso de decapado con ácidos fuertes, como ácido sulfúrico o ácido clorhídrico, requieren un transporte seguro de estas sustancias mediante tubos y tuberías. Para el transporte de estos materiales corrosivos, están disponibles tuberías y tubos de plomo extruido de alta calidad, con tamaños, espesores de pared y longitudes personalizables. Las tuberías sometidas al proceso de extrusión se caracterizan por ser productos de plomo densos y uniformes. Los serpentines calefactores de plomo de una sola pieza, también fabricados con tuberías de plomo extruido, son sumergibles en tanques de decapado y están diseñados para funcionar en ambientes altamente corrosivos.